Modernizando el voto sin perder la esencia

Después de pasado el Super Tuesday¹ de las primarias presidenciales de los Estados Unidos, me resulta imposible no enfocar mi atención en las tecnologías implementadas, especialmente en el condado de Los Ángeles, una de las jurisdicciones más pobladas del país con más de 5.4 millones de electores habilitados y donde más se ha estado modernizando el voto en los últimos años. El sistema automatizado usado en este condado, posiblemente el más moderno hoy en día en todo el país, no sólo refleja precisión y transparencia en los resultados, sino que también marca el camino a seguir en el futuro para las elecciones en América y el resto del mundo.

Voto en papel: sigue siendo problemático

Votar en una elección debería ser un proceso simple e intuitivo y que minimice la posibilidad de errores, pero en algunos países el acto de votación se convierte en todo un desafío. En México, por ejemplo, donde se pueden formar coaliciones políticas entre dos o más partidos, en la boleta se muestran todos los partidos por separado, en lugar de un símbolo o tarjeta para la coalición. Esto hace que el proceso de uso de la boleta sea confuso ya que, si un elector marca dos o más opciones pertenecientes a la misma coalición el voto es válido, y se cuenta como un solo voto para esa coalición, mientras que si las opciones son de coaliciones distintas el voto se anula. Esto es problemático en tres frentes:

En la primera vuelta de las elecciones de Guatemala en 2023 encontramos un hallazgo sorprendente: el voto nulo terminó siendo la opción mayoritaria, con un porcentaje del 17.4 %, eclipsando incluso a la candidata que obtuvo la más alta votación afirmativa. Aunque prevalece la teoría de que una porción significativa de estos votos nulos se hizo de manera consciente por ciudadanos insatisfechos con las opciones políticas, no se puede descartar la incidencia de errores involuntarios durante el proceso de votación, así como la posible existencia de actividades fraudulentas (comunes en elecciones manuales) que contribuyeron a ese alto índice de anulaciones.

Modernizando el voto: Caso Los Ángeles

Entre las innovaciones sobresalientes en las recientes elecciones Primarias de los Estados Unidos, se encuentra la máquina de votación de Los Ángeles, introducida hace ya 4 años y que sigue siendo de las más modernas del país. La máquina comprende un sistema híbrido que combina lo mejor del voto electrónico con la redundancia física que ofrece el voto en papel. Los votantes realizan sus selecciones marcándolas en una pantalla táctil, y el voto se imprime en una boleta de papel con letra clara y legible de computadora, reduciendo el riesgo de errores y confusiones. La impresión en papel proporciona una herramienta confiable para la verificación por parte del elector, las auditorías poselectorales y ayuda a disipar preocupaciones sobre la fiabilidad del voto puramente electrónico. Además, estas máquinas garantizan seguridad al no estar conectadas a internet y no conservar datos personales de los votantes.

Este sistema, que combina tecnología digital con verificación física, ofrece una solución intermedia muy atractiva para aquellos países que quieren modernizar sus elecciones, y a la vez mantener una experiencia de votación más parecida a la tradicional.

Para el desarrollo del sistema VSAP del condado de Los Ángeles se llevaron a cabo estudios de usabilidad para comprender la idiosincrasia electoral de los votantes, así como las necesidades de accesibilidad para persona con distintos tipos de discapacidad, con la finalidad de disminuir la necesidad del voto asistido. En función de estos estudios se diseñó el sistema, considerando también los requerimientos de verificabilidad, transparencia y seguridad, para generar un sistema robusto, que dejara satisfechos tanto a votantes como a autoridades electorales y actores políticos.

El uso de máquinas de votación con pantalla táctil -en tiempos donde una inmensa mayoría de los ciudadanos ya usa teléfonos inteligentes-, tiene el potencial de facilitar la votación y minimizar los errores que pudiera cometer el votante a la hora de marcar una boleta en papel con múltiples selecciones. Incluso si la legislación lo exige, podrían programarse para incluir conscientemente la opción de un voto nulo o en blanco, garantizando así que cualquier selección de esta naturaleza sea una decisión deliberada del votante. Esto contrasta con las boletas en papel, donde los errores de marcar partidos equivocados u otras inconsistencias pueden pasar inadvertidos hasta que la boleta es escaneada o contada, resultando en un voto inválido sin la oportunidad de corrección por parte del votante.

Mientras las naciones continúan navegando por el dinámico panorama electoral internacional, los ojos estarán puestos en esta innovación angelina, y en cómo su adopción podría significar un futuro de elecciones más precisas y transparentes alrededor del mundo.

Notas:

1. Las elecciones primarias en los Estados Unidos se hacen por estado, y cada estado puede llevarlas a cabo en la fecha de su conveniencia. El Super Tuesday (Super Martes) es un martes seleccionado normalmente en el mes de febrero o marzo, donde los partidos Demócrata y Republicano en un gran número de estados acuerdan hacer sus primarias en conjunto. Aunque los estados que se suman al Super Tuesday pueden variar de una elección a otra, normalmente se escogen cerca de un tercio de todos los delegados de cada partido político. ↩︎

Créditos de imágenes:
Instituto Nacional Electoral de México – INE
County Clerk del Condado de Los Ángeles, USA
Foto de portada cortesía de IDEO