USA 2024: transparencia vs desinformación
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USA 2024: Triunfa la transparencia, pierde la desinformación

Las elecciones presidenciales de 2024 en Estados Unidos pasarán a la historia no solo por el resultado atípico en el que Donald Trump vence a Kamala Harris -incluso en el voto popular, luego de perderlo en dos elecciones seguidas-, sino también por el ejemplo de transparencia que marcó todo el proceso electoral. En una época donde la desinformación sobre fraude electoral parecía ser la amenaza más significativa para la confianza pública, la elección no solo transcurrió sin incidentes relevantes, sino que también se manejó con una integridad que desarmó los argumentos de los detractores.

La candidata derrotada, Kamala Harris, jugó un papel crucial en este escenario al conceder su derrota de manera oportuna y al pronunciar un discurso que quedará grabado como un punto de inflexión en la lucha contra la desinformación. El discurso de aceptación del resultado introdujo calma tras la elevada polarización, reforzó la confianza en el sistema electoral, y dejó un importante ejemplo para el futuro.

Por su parte, el presidente electo, Donald Trump, fue invitado a la Casa Blanca por el actual presidente Joe Biden para discutir la transición de poder de manera tranquila y ordenada, en una reunión que buscaba enviar un mensaje inequívoco de estabilidad democrática al mundo. Estados Unidos volvió a dar el ejemplo.

El discurso de Kamala Harris

El discurso de Kamala Harris, pronunciado pocas horas después de que se confirmaran los resultados, fue un llamado a la unidad y a la aceptación de los procesos democráticos. «Uno de los fundamentos de la democracia estadounidense es que, cuando perdemos unas elecciones, aceptamos los resultados. Ese principio distingue la democracia de la tiranía», dijo Harris en su mensaje televisado. En este discurso, también contribuyó a rechazar la desinformación sobre fraude electoral, que en elecciones pasadas había polarizado al electorado y sembrado dudas injustificadas sobre el sistema.

La derrota de la desinformación

En el período previo a las elecciones, la desinformación sobre fraude electoral había alcanzado niveles preocupantes. Sin embargo, diversas iniciativas lograron contrarrestar estas narrativas falsas. La CISA, junto con organizaciones como Common Cause y esfuerzos de comunicación desde las grandes plataformas tecnológicas, implementaron estrategias efectivas para informar al público y prevenir la propagación de información falsa.

Jay Young, director senior de Common Cause, subrayó en una conferencia de prensa posterior a las elecciones:

“No podemos continuar con este ataque a nuestras instituciones democráticas. Debemos rechazar la idea de que si nuestro candidato gana, el sistema es legítimo, pero si pierde, hay fraude. Tenemos que cambiar esa narrativa.”

Estas palabras resonaron ampliamente, especialmente en un contexto donde las grandes empresas de tecnología como Google y Meta también tomaron medidas estrictas contra la diseminación de información falsa.

Por otro lado, las demandas por difamación presentadas por empresas como Smartmatic y Dominion contra figuras públicas y medios que promovieron falsedades sobre sus sistemas en elecciones anteriores sirvieron como un fuerte recordatorio de las consecuencias legales de perpetuar teorías infundadas.

USA 2024: Triunfa la transparencia, pierde la desinformación

El papel de los votantes y la tecnología

Los votantes también jugaron un papel clave en el éxito de estas elecciones. Según datos de encuestas postelectorales, una mayoría significativa expresó confianza en el proceso electoral, un indicador del éxito de las campañas de educación cívica lideradas principalmente por organizaciones no gubernamentales.

La tecnología electoral, a menudo un punto de ataque para los teóricos de la conspiración, demostró ser un elemento fundamental para garantizar elecciones transparentes. Las auditorías realizadas a los sistemas de votación y los procesos de verificación manual en estados clave confirmaron la precisión de los resultados. Esto no solo reforzó la confianza pública, sino que también desmontó los argumentos de aquellos que intentaron sembrar dudas sobre la legitimidad de la elección.

Un mensaje para el futuro

El proceso electoral de 2024 deja varias lecciones importantes. En primer lugar, la transparencia y los procesos de verificación son fundamentales para generar confianza y combatir la desinformación. Las acciones de líderes como Kamala Harris, combinadas con el trabajo de instituciones confiables, ayudaron a fortalecer la democracia en un momento crítico. En segundo lugar, es esencial que los actores políticos y los ciudadanos rechacen las narrativas de fraude sin fundamento, ya que estas erosionan la confianza en las instituciones que sostienen el sistema democrático.

Finalmente, el ejemplo dado por Joe Biden al priorizar la estabilidad por encima de las diferencias políticas y la aceptación de Donald Trump como presidente electo refuerzan la idea de que la democracia estadounidense, aunque imperfecta, sigue siendo un modelo para el mundo.

En una época donde la desinformación parecía un riesgo difícil de mitigar, las elecciones de 2024 en Estados Unidos demostraron que la verdad, la transparencia y la confianza institucional pueden prevalecer.

Créditos de imágenes:
Photos by Manny Becerra on Unsplash
Photo by Marek Studzinski on Unsplash

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